Ubicado en la ciudad de Copenhague, Dinamarca, se encuentra uno de los castillos más impresionantes y emblemáticos de Europa: el castillo de Rosenborg. Este majestuoso edificio de estilo renacentista es una de las atracciones turísticas más populares de la ciudad y una parada obligatoria para todos aquellos que visitan la capital danesa.
Historia del castillo
Construido en el siglo XVII por el rey Christian IV, el castillo de Rosenborg fue utilizado como residencia de verano por la familia real danesa durante más de 200 años. Sin embargo, con el paso del tiempo, el castillo fue perdiendo su importancia y en 1838 se convirtió en un museo abierto al público.
En la actualidad, el castillo de Rosenborg es uno de los mejores ejemplos de la arquitectura renacentista en Dinamarca y alberga una impresionante colección de arte, mobiliario y objetos de la realeza danesa. Además, su ubicación en el hermoso parque de Rosenborg lo convierte en un lugar ideal para disfrutar de un día al aire libre en Copenhague.
Explorando el castillo
Al entrar en el castillo de Rosenborg, los visitantes se encontrarán con una serie de habitaciones y salones que cuentan la historia de la monarquía danesa. Entre los más destacados se encuentran la Sala del Trono, el Salón de los Caballeros y la Galería de los Retratos, donde se pueden admirar las pinturas de los reyes y reinas de Dinamarca a lo largo de los siglos.
Pero sin duda, la mayor atracción del castillo es el Tesoro Real, ubicado en el sótano del edificio. Allí se pueden encontrar piezas de joyería y objetos de gran valor, como la corona de Christian IV y la espada de coronación de Frederik III.
Consejos para la visita
- Compra las entradas con antelación: debido a la gran afluencia de turistas, es recomendable comprar las entradas en línea para evitar largas filas en la entrada del castillo.
- Llega temprano: para disfrutar del castillo con tranquilidad, es mejor llegar temprano en la mañana antes de que se llene de visitantes.
- No te pierdas el cambio de guardia: todos los días a las 12:00 pm, se lleva a cabo un cambio de guardia frente al castillo, una ceremonia que vale la pena presenciar.
- Utiliza una audioguía: para conocer más sobre la historia del castillo y sus habitantes, se pueden alquilar audioguías en varios idiomas en la entrada.
El parque de Rosenborg
Además de visitar el castillo, el parque de Rosenborg también es un lugar que no se puede dejar de explorar. Con más de 400 años de antigüedad, este parque es un oasis de tranquilidad en medio de la bulliciosa ciudad de Copenhague. Aquí se pueden encontrar hermosos jardines, lagos, fuentes y senderos para caminar y relajarse.
Además, en verano, el parque se convierte en un lugar ideal para realizar un picnic o disfrutar de un concierto al aire libre. También se pueden alquilar bicicletas y pasear por los senderos que rodean el parque.
Conclusiones
Explorar el castillo de Rosenborg en Copenhague es una experiencia única que no se puede perder ningún amante de la historia y la arquitectura. Con su impresionante colección de arte y su hermoso parque, este castillo es una parada obligatoria en cualquier viaje a la capital danesa. No olvides seguir los consejos para disfrutar al máximo de tu visita y no te pierdas la oportunidad de conocer uno de los tesoros más preciados de Dinamarca.
